
22 Enero
22 Enero
Analicemos.
Los incendios producidos en viviendas suelen provocarse por:
Las víctimas de estos incendios suelen ser:
Es decir, estaríamos ante incendios cuya causa habría que buscarlos en la denominada pobreza energética, o sea en aquellos domicilios donde no es posible por carecer o no disponer de los medios necesarios para mantener un sistema de calefacción integral de la vivienda que supone un sistema más eficaz y menos peligroso para poder calentarse.
Ante estos casos cómo realizar una prevención eficaz.
Actualmente se dispone de una amplia gama de productos de detección de incendios para instalar en domicilios, asequibles económicamente y conectables, lo que permiten múltiples funcionalidades para poder comprobar y recibir alarmas a distancia y por tanto intervenir adecuadamente.
Pero no existe una concienciación ciudadana sólida en esta materia, igual que cada vez es más frecuente que se doten a las viviendas de preinstalación de sistemas de seguridad, o que los propietarios las instalen por su cuenta ante el miedo a que vulneren su intimidad, en lo referente a prevención de incendios no sucede lo mismo, quizás por ver un incendio como algo lejano que no nos puede ocurrir a nosotros.
Para ello las administraciones competentes en materia de seguridad deberían comenzar por:
Por último uno de los aspectos a tener en cuenta es, además de los medios para una efectiva prevención, es disponer de vías de evacuación accesibles en caso de producirse un incendio.
Una de los medios más utilizados para evitar intrusiones no deseadas en las viviendas es la de instalar rejas en las ventanas, cuando esta son de planta baja, pero esto que puede resultar eficaz para la intrusión, puede convertirse en una jaula en caso de incendio impidiendo salir de la vivienda, por ello la importancia de no eliminar las vías de evacuación que se dispongan con este tipo de medidas, y en caso de instalarlas que sean anti pánico de fácil apertura desde el interior.fake rolex kaufen
Las soluciones mejor antes que después de las desgracias.
fuente: cuadernosdeseguridad.com